jueves, 5 de enero de 2023

CLAUSURA 2023: TORNEO CLAVE PARA EL FUTURO ROJO

 


Después de un atípico apertura 2022 en donde los Diablos Rojos del Toluca mostraron una bipolaridad total, la cual alcanzó para llegar a la final y ser derrotados de manera bochornosa, se cerraron filas, se tuvo mucho descanso y se empezó a trabajar para un torneo que será clave en el proyecto de Francisco Suinaga, Antonio Naelson “Sinha” e Ignacio Ambriz.

La base del equipo se mantuvo, realmente no hubo una baja como para decir “extrañaremos mucho a este jugador”, lamentablemente, para mí, el equipo no se reforzó de la manera adecuada, dando esto a entender que: a) se confía mucho en los jugadores que mostraron muchas deficiencias el torneo pasado, b) se buscará implementar otro esquema donde puedan lucir más o c) hubo un deficiente análisis sobre las áreas de mejora.

Las llegadas de Carlos Orrantia, Brian García, Jesús Venegas y Edgar López no impresionaron, quizá la ventaja es que son mexicanos y eso dará oportunidad a Ambriz de jugar más con sus alineaciones con el fin de que no se fuerce la presencia de algún nacional que esté ahí más por la regla que por talento. Esperamos que sirva su llegada y demuestren calidad.



Maximiliano Araujo es un caso aparte. Jugador de talento, calidad probada y que vendrá a aportar, seguramente, con su talento. Su llegada beneficia al equipo sin duda alguna, la cosa será que le encuentren lugar donde pueda aportar desde el principio y no tenga que estar brincando de posición partido a partido.

No me queda duda alguna que la defensa sigue siendo el talón de Aquiles del equipo. Lo mostrado el cuatrimestre pasado, sobre todo en la final, nos decía que la lógica era traer a otro jugador con la capacidad de aportar a esa línea y así tener más tranquilidad. Es cierto que la continuidad regularmente trae frutos, así que esperemos que huerta, Ortega, Mosquera, Torres Nilo y los jóvenes demuestren, finalmente, cohesión y ya no suframos tanto.

La delantera es otra área que me genera dudas. Sanvezzo y González quedaron mucho a deber y este torneo debe ser de revancha. Detrás de ellos estará un López recién llegado, joven y seguro con hambre de trascender. Aquí la cosa es que ¿No tiene Toluca un delantero joven para que tenga minutos? Se hablaban maravillas de Abitia y no tuvo más que un minuto el torneo pasado. Habría sido preferible darle más minutos a alguien de cantera, pero los que saben son aquellos que dirigen al equipo.



Este torneo será clave para el actual plantel. Hay calidad, pero falta que jugadores como Leo Fernández, Meneses o González den el paso adelante para que, con la calidad que se sabe tienen, guíen al equipo a un mejor puerto. También Ignacio Ambriz debe definir un estilo y que ese sea uno que represente de la mejor manera a nuestra gloriosa Institución. No podemos permitirnos más sufrimiento o humillaciones.

Hace unos meses se llegó a la final con un funcionamiento irregular. Si las cosas son más parejas podría volver a pasar lo mismo, aunque siendo objetivo y dejando de lado el corazón, dudo mucho que se pueda volver a tener esa suerte si no se hacen las cosas bien en todos los partidos. Hay material humano para volver a soñar, claro que sí, pero se debe tener una idea fija de como jugar, sino la cosa será pelada.

El Deportivo Toluca deberá dejar de lado ya todo aquello que nos hizo daño en años recientes. Se estuvo cerca de la gloria hace poco y lo menos que se puede hacer es buscar llegar de nuevo a esa fase final, pero sin tanta irregularidad. Desde el 7 de enero será momento de que nosotros, los aficionados, regresemos a alentar desde las gradas, desde el sillón, desde cualquier ciudad y transmitir esa vibra que nos hizo la mejor afición el torneo pasado. De nosotros no depende lo que pase en el rectángulo verde, pero sí que nuestra casa sea una unida y que no se rompa pase lo que pase.



Bienvenido, clausura 2023 y ojalá que traigas muchas cosas buenas para los Diablos Rojos del Toluca.

lunes, 31 de octubre de 2022

APERTURA 2022 TOLUCA: ALTIBAJOS QUE ACABARON EN DESGRACIA

 


El Deportivo Toluca cerró el Apertura 2022 de la manera más desastrosa posible: siendo goleado en la final. Es complicado encontrar un torneo tan lleno de contrastes en las últimas épocas de nuestro glorioso equipo rojo. Emoción, decepción, enojo, alegría, tristeza, ilusión, todo se conjuntó a lo largo de los 3 meses y 29 días que duró nuestro campeonato.

Sería muy fácil sólo tratar de escribir de los 2 partidos de la final, pero, a lo largo de todas las jornadas, es más, desde la planificación del torneo, hubo cosas que disfrutamos y que odiamos. Empecemos por el armado del equipo. Después de años llenos de intrascendencia, incluido el pago de una aberrante multa, Valentín Díez decidió abrir la chequera e hizo caso a las peticiones del técnico en turno, dejando de lado a promotores que tanto mal le hicieron al club.

En cosas anecdóticas, pero que auguraban el trajín tan raro del club en este torneo, tuvimos el robo de la ropa deportiva antes del inicio del torneo. ¿A qué club le tenía que pasar esto? pues a nosotros. Dio para chistes, para cazar a gente que vendía robado, muchos se ocultaron por semanas y otros se daban golpes de pecho argumentando inocencia que, realmente, nunca existió. Otra fue la supuesta llegada de un delantero del fútbol europeo (Luuk de Jong o Edison Cavani), esto generó euforia y que la gente se volcara a comprar abonos. Muchos se decepcionaron porque fue humo, aunque al final su gasto valió la pena.

Fueron 8 refuerzos los que llegaron, que algunos funcionaron y otros no es normal, pero de eso vamos después. Con un plantel “basto” para el técnico es que se empezó a competir. Jugando bien, muy bien, por momentos, pero con ratos siendo dominados por los rivales, el Toluca logró un buen inicio, colocándose en la parte alta de la tabla.

Los puntos hacían llevaderas las carencias del equipo, las cuales fueron pesando y pesando, haciendo que el equipo acumulara una larga racha de encuentros sin ganar. Pese a todo y por la basta cosecha de un principio, se pudo clasificar a la liguilla en un decente sexto lugar, quizá sin mucha ilusión por parte de la afición por el acumulado del torneo, pero con algo de esperanza.

En el torneo regular vimos todos que la portería ya se sentía más segura que en el pasado, que la defensa seguía haciendo agua por la falta de calidad de quienes llegaron y se quedaron, pero que se cubría lo suficiente como para avanzar, que la media estaba bien a secas, aunque si alguien faltaba no se tenía suplentes. La generación de juego era nuestra mejor parte, pero quienes generaban tuvieron que cargar con más peso del necesario dado que la delantera fue flaca, seca, nula y eso, eso al final iba a acabar pesando.

También durante la pretemporada se habló mucho de que se daría oportunidad a jóvenes, que la cantera podría tener chance de alzar la mano y eso no sucedió. Hubo momentos como para dar minutos a jóvenes para que empezaran a foguearse, para que agarraran ritmo de primera y demostraran que tienen para competir con extranjeros y hacer la diferencia. Los Vioalnte, Abitia, Gamboa, Llanas y demás tendrán que esperar otro torneo para ser tomados en cuenta.

Claro que se pueden sacar cosas positivas de las 17 jornadas regulares. Se logró una buena cantidad de puntos y eso genera tranquilidad en el tema porcentual, varios de los refuerzos están como para quedarse y aportar porque demostraron cosas positivas, el equipo se volvió un equipo, más allá de los resultados, todos jalaban parejo y eso alcanzó para cosechar algo bien sembrado.



Puntos negativos hay también, y muchos. La necedad por querer utilizar un sistema de juego sin los jugadores adecuados pesó por muchos momentos, la mala elección de jugadores en posiciones puntuales pesó en muchos partidos, no es posible que tus delanteros tengan tan poco gol y que tus centrales no pudieran hacer que la portería se fuera en cero más que en 2 ocasiones; la escasa banca también se vio y pesó muchísimo para la afición que se dieran incontables oportunidades a jugadores que poco o nada aportaban y hasta parecía que tenían un “pacto” para ser tomados en cuenta pese a no demostrar calidad o que hicieran la diferencia.

En general fue un torneo regular bastante decente, sirvió para que se viera un poco mejor el equipo respecto a torneos anteriores, que no era tan difícil, y se regresaba a un repechaje. Lo importante era seguir dando pie a un proyecto que empezó mal y que medio iba enderezando el rumbo.

Siguiente fase: la reclasificación contra Juárez. Partido donde el equipo empezó a cambiar de estilo por uno más práctico, no tan apabullante respecto a la posesión y quizá con más contundencia. Eso sí, la defensa seguía haciendo agua y fue gracias a la mala calidad del rival que se avanzó con un marcador más abultado. Aquí Ambriz modificó su parado táctico tratando de que los puntas agarraran ritmo y le salió.



Cuartos de final: Santos el rival. Esta serie fue la que acabó de enganchar a la afición con el equipo. Las emociones se desbordaron en el partido de ida, con un resultado positivo que llegó gracias al hambre de triunfo que se mostró y no tanto a la calidad. De esas ocasiones que el extra es el que te da el triunfo y más porque se jugó de manera inteligente en la vuelta (eso sí, con la respectiva dosis de suerte) y se avanzó, haciendo que el fuego de todo mundo se encendiera y se empezara a soñar con una final.

Semifinales: el “odiado rival” para muchos fue el enemigo. Otra serie donde la diosa fortuna se hizo presente. Toluca no jugó mal la ida, de nuevo tuvo suerte en muchos momentos, pero mostró contundencia y de no ser por unos centímetros la ventaja en la vuelta habría sido mucho mayor. El segundo juego se mostraron muchas carencias, se jugó a no perder y casi se perdía. De nuevo fue el hambre de trascender lo que sacó a flote al equipo y no tanto un buen nivel futbolístico o un gran planteamiento táctico.

Se llegó a la final, se cumplió un sueño. Toluca estaba peleando por el título mucho antes de que la afición lo esperaba. El proyecto rendía frutos muy rápido y todas y cada una de las carencias se desvanecían frente a la ilusión de volver a dar la vuelta. Era obvio que, por la manera en que se llegó a la final, Toluca no era favorito ni mucho menos, sin embargo, el fútbol puede darte sorpresas y vaya que la fiel afición de los Diablos se llevó una muy desagradable.

La serie por el título llegó. Pachuca era el rival y llegaba embalado, con un fútbol dinámico y vistoso; tenía una base de mexicanos formados en su cantera, jóvenes y extranjeros de gran calidad en cada una de sus líneas, además, una banca con revulsivos suficientes en caso de que la cosa se le complicara.

Tristemente, la serie se acabó a los 15 minutos. El rival salió enchufado, sin piedad y se aprovecharon de las carencias que se vieron a lo largo del torneo, sumando a eso que el oportunismo que se había dado en las series anteriores no llego, el desenlace fue más que desastroso, fue una derrota humillante en casa la que nos llevamos. Pese a eso, la ilusión, la fe y la esperanza no desaparecieron en la afición, esto porque las ganas de atacar y tratar de acortar la desventaja se vieron, esto en gran parte gracias al enorme apoyo que se dio en las tribunas. Un 1-5 se dio y ya sólo esperar a que se finiquitara el asunto.

En la vuelta las cosas empezaron positivamente, gol para abrir el marcador, un equipo que tenía intención y un poco de suerte gracias a Volpi y su penal detenido. Todo eso se disipó por culpa de un gol que mata esperanzas casi al finalizar el primer tiempo. Lo de Guzmán sentenció a los rojos y de ahí llegó el momento más doloroso que se pudo ver.



Toluca salió dormido, un gol de vestidor mató toda esperanza y no sólo ello, sino también mató el poco ánimo que le quedaba a los de la cancha. No recuerdo una final tan displicente en mucho tiempo, Toluca se veía derrotado, sin idea, con ganas de que todo acabara e irse a casa. De milagro el marcador no fue más abultado, de por si nos tuvimos que tragar el peor marcador en la historia de las finales, las burlas, el dolor y ahí seguimos.

El catastrófico marcador generó muchas dudas. ¿Es correcto continuar con el proyecto Ambriz? ¿La directiva dará un paso al costado? ¿El equipo tiene los tamaños para regresar a esta instancia y finalmente ganar? Todo esto lo veremos en unos meses. De mi parte, creo que el proyecto Ambriz debe seguir, pero ya no se debe tener un juego tan irregular. Se le perdonó lo de la multa porque agarró un toro bravo, lo de la final es 100% de él porque no planeó bien las estrategias para enfrentar de manera digna al rival y porque finalmente él tuvo la decisión de aprobar a todos los jugadores.

La directiva encabezada por Suinaga y Sinha prometieron cosas y se mencionó que de no ganar el título daban un paso al costado. No sé si eso pase, quizá ganaron un poco de crédito por la final, lo que sí tienen que hacer es convencer a Valentín de que siga abriendo la cartera, de no ser así no se podrá intentar siquiera llegar a la misma instancia en que estuvimos.

Respecto a los jugadores, vimos que muchos no tienen los tamaños para portar la playera del equipo. Debe haber una limpia en varias partes y traer jugadores, de preferencia mexicanos, para reforzar. Ambriz sufrió muchísimo por la falta de nacionales de calidad, eso lo obligó a meter, en ocasiones, a algunos que no tenían nivel, pero se necesitaban para cumplir con las reglas del torneo.



Siento que este resultado debe servir para que jugadores como Fernández, Ruiz y Huerta crezcan y sepan adaptarse a los partidos de alta presión. Volpi, Baeza y Meneses deben dar el Do de pecho y no caerse en los momentos fundamentales, fuera de ellos todos son prescindibles, con algunos como Navarro o Álvarez que aporten experiencia desde la banca.

¿A quién daría de baja del equipo? Luis García, Alan Rodríguez, Raúl López, Carlos Guzmán, Camilo Sanvezzo, Carlos Rodríguez, Jorge Torres Nilo, Haret Ortega, Sebastian Saucedo, Jordan Sierra. La mayoría no aportaron, a algunos se les puede sacar algo bueno porque tienen cartel y/o juventud.

La misión para el armado del plantel será dura, Toluca merece estar en las instancias finales, pero no merece ser humillado como ahora. Vendrán días de calma y cuando regresen deberán tomarse las decisiones pertinentes de la manera más pronta posible para que así se pueda hacer una buena pretemporada.

Cerramos con esos engendros del demonio llamados aficionados. Vaya temporada que se dio por su parte, animando en todo momento, creando una comunión increíble y callando bocas respecto a quienes decían que éramos fríos y pocos. Quizá no seamos los millones que tienen los populares, pero vaya que nos morimos en la tribuna esta temporada. No nos merecíamos un final así, pero nos toca pagar los platos rotos de lo que no se hizo en el rectángulo verde.



Sea como sea, este Toluca plagado de parches logró llegar a la final, con un resultado non grato, pero podría ser un buen preámbulo si se toman decisiones inteligentes en el futuro cercano respecto a bajas y altas. Estoy seguro que quien llegue a leer esto estará de acuerdo que se gane o se pierda se apoyará al equipo por siempre (o mientras lo tengamos) y que así pasen años sin campeonar ahí estaremos, apoyando y exigiendo porque el Toluca no es popular, pero está lleno de una grandeza tan característica y especial que sólo pocos podemos entender.

jueves, 8 de septiembre de 2022

DERROTA EN EL VOLCÁN ¿DEBACLE ROJA O MALA RACHA?


Hay cosas que uno no acaba de entender con el actual equipo del Toluca: ¿falta talento, ganas, trabajo o simplemente la mala suerte vuelve a apoderarse de los Diablos Rojos? Pese a que la situación en la tabla general refleja que las cosas no están tan mal por la cantidad de puntos que se obtuvieron al inicio del torneo, hay factores que pueden indicar que, de nuevo, se cierra mal y se pone en riesgo la clasificación.

A diferencia de otros semestres, el Toluca de Ambriz tiene un estilo definido, con todos sus pros y sus contras, lo malo es que ese estilo ha generado cierta desesperación en una parte de la afición y aquí es donde empieza todo. Salir jugando, el toqueteo de balón para tratar de abrir espacios y la gran posesión que se tiene está siendo intrascendente, esto a causa de la nula capacidad de anotar de los centros delanteros.

En fechas pasadas eso no pesaba porque se concretaban muchos goles por parte de otros jugadores, pero si estos no andan finos tampoco el peso inexistente de González y Sanvezzo en la zona de definición dificulta mucho las cosas. 2 goles en 5 partidos son muy pocos, la defensa se viene doblando y en ese tramo se han recibido 9, todo el colchón que se tenía desapareció y las cosas se complican.



Mucha gente se cuestiona (yo incluido) ¿Por qué no meter a un tipo como Abella para foguearlo? Peor arriba no se puede estar. En el escenario más malo la cosa seguiría igual y en el más bueno se podría tener a un jugador que por su hambre de establecerse haga muy bien las cosas, digo, no creo que sea muy complicado superar lo hecho hasta ahora por el paraguayo o el brasileño.

Otra cosa que va muy de la mano por la falta de un delantero de calidad es la generación de ocasiones. Creo, sin mucho temor a fallar, que la ausencia de tiros de media y querer entrar casi casi hasta la cocina se da porque quieren forzosamente hacer que el “9” en turno meta gol y genere confianza y porque, al saber que les cuesta tanto anotar, quieren tratar de asegurar y eso impide que se fluya de manera armónica en el área rival.

Las flaquezas de la media y la defensa están volviendo a surgir. Siento que en esas zonas hay gente que puede levantar el barco, pero debe aplicarse a fondo para que la cosa se arregle y no volvamos a sufrir.



La paciencia en muchos se acabó, las dudas empiezan a ser muy fuertes en otros. Un sector más pequeño sigue con confianza en el proyecto, más al saber las deficiencias el desánimo llega a invadirlos. Hay grupos que como carroñeros esperaban que esto sucediera para tundir al actual técnico y empezar a hablar de otros que ya no son parte de la institución y que hacen comparaciones y comentarios muy fuera de lugar.

Estos son los momentos en que la afición debería estar más unida y más que tirar contra muchos lo que necesita hacer es exigir, exigir de buena manera porque sabemos que material humano hay para salir del bache en estas tres jornadas y entrar a tono a la liguilla o repechaje. La situación no es complicada (aún), pero una derrota más y los focos rojos se prenden.



¿Se levanta el barco de Ambriz o de plano se hunde como el Titanic? Eso lo veremos el sábado contra Pumas, un partido donde, más que nunca antes en este torneo, se debe ganar, jugando como sea, pero se debe ganar. Urge un envión anímico para que se estabilice el equipo. De la afición no faltará nada en la tribuna, de eso estoy seguro, lo que esperamos todos es que en la cancha tampoco falte lo que se necesita para ganar.

jueves, 18 de agosto de 2022

EMPATE DE APRENDIZAJE FRENTE A RAYADOS

 

Toluca tuvo una prueba de fuego la noche de ayer contra Rayados. Fue un partido que le sirvió para saber que va en buen camino, pero aún está unos pasos atrás respecto a los grandes contendientes del torneo. El estadio estaba casi lleno, extraño para ser media semana, y los que pudimos asistir disfrutamos de un buen espectáculo, eso sí, odio a las plataformas porque impidieron que mucha gente pudiera disfrutar el encuentro.

La ausencia de Volpi fue la única modificación que tuvo el equipo, el rival sí realizó varios cambios pensando más su clásico y también para probar a jugadores con pocos minutos. El primer tiempo fue prácticamente dominado por los Diablos, sin embargo, y como en muchos partidos anteriores, faltó saber liquidar el partido para ya no tener problemas en minutos posteriores.



En el segundo tiempo las cosas cambiaron. Monterrey se puso más serio y empezó a meter gente con más protagonismo en el equipo, dominó el balón e hizo que el Toluca dejara de jugar a lo que el Toluca sabe jugar, los pelotazos empezaron a prevalecer, los errores en pases sencillos llegaron y la visita se convirtió en amo y señor del encuentro.

Cabe resaltar que Gustavo Gutiérrez tuvo un buen partido en el complemento, de no ser por él la derrota habría llegado y si bien en el gol hay quien piensa que pudo hacer más, creo que era muy complicado sacar el remate de Aguirre. En general todo lo bueno que se vio en el primer tiempo se neutralizó en el segundo y podemos decir que el equipo se fue tablas.



Molesta un poco esa actitud de no matar al rival lo más pronto posible porque así le das vida y pueden suceder cosas como en este y otros encuentros, sin embargo, es parte del proceso de aprendizaje de un equipo cuya base es reciente y que nos ha dejado más momentos dulces que amargos en este torneo.

Jugadores que han tenido un buen desempeño demostraron que son humanos y no siempre saldrá perfecto todo. Que mejor que los Marcel, los Huerta, los Angulo puedan aprender de sus errores sin que eso cueste una derrota y esta fue la ocasión. También queda demostrado que lo corto de la banca no está como para dejar al equipo sin su triángulo de chaparritos porque sin ellos todo se desajusta.



Creo que Ambriz puede sacar mucho, muchísimo de este encuentro. Debe reforzar a sus dirigidos mentalmente, el verse superados va a pasar, lo importante es que se mantengan en su idea, que aprovechen sus oportunidades y con ello tengan una mejor manera de manejar el partido con ventajas quizá no holgadas, pero sí cómodas.

Toluca está bien, seguro va a pelear por el título, lo que sí deberá hacer será compensar la falta de plantel competitivo en la banca con buen juego colectivo y más definición. El siguiente partido sí deberá ser más contundente porque se volvieron a dejar puntos en casa y hay que compensar eso en otro lado.

lunes, 15 de agosto de 2022

TRIUNFO SUFRIDO EN EL AZTECA

 


Toluca derrotó a Cruz Azul, se mantiene en la cima de la tabla general una semana más y hay que aclarar una cosa: son los menos culpables de la poca capacidad arbitral que tuvieron Fernando Hernández y su equipo durante el segundo tiempo. Sí, los últimos minutos se volvieron un caos dada la nula personalidad del silbante, poco a nada tuvieron que ver los Diablos en ello.

Lo que nos dejó la victoria en el Azteca fue confirmar que el equipo es uno con personalidad, que sabe recuperarse y remontar, que está fuerte mentalmente y que los pasajes de buen fútbol cada vez son mayores, eso en el aspecto positivo. En lo no tan bueno tenemos que se sigue sufriendo (un poco menos que antes) en la defensa, que no se acaba al rival cuando se tiene la oportunidad y que, en términos generales, le gusta sufrir a este equipo por ser tan canchero en ocasiones.



Los dos goles del rival fueron a causa de errores propios más que por buenas jugadas, eso sí, también la fortuna nos acompañó en esta ocasión porque las ocasiones de peligro donde nuestra defensa fue rota no se concretaron gracias a lo malos que fueron los rivales. Se debe seguir trabajando en esa área para ya minimizar esos errores que acaban en nuestras redes.

Al César lo que es del César. Que lujo de media tenemos. Marcel y Navarro son, sin lugar a dudas, jugadores con una visión y capacidad extraordinaria, comprometidos con el equipo y que están rindiendo mucho más de lo que muchos creían y eso será siempre positivo, más con Marcel porque aún no llega a su máximo nivel dada su juventud y de seguir así podría tirarle a cruzar el charco pronto.



Seguimos en busca del mejor nivel de nuestros delanteros. Siento que en esta ocasión no hubo mucho para González, quien se vio participativo en pelear balones y jugar de poste, pero también necesita cazar más. Sanvezzo otro gol a su cuenta de penal, por lo menos sabemos que buen cobrador es.

La manera paciente y precisa de jugar del Toluca agrada mucho. Se minimiza la pérdida de balón y se busca maximizar la posesión, factor que es bueno porque así el rival tiene menos oportunidad de crear ocasiones, pero es malo porque en ocasiones es intrascendente eso y no se finalizan las jugadas.



El marcador acabó siendo justo pues el fútbol premió, de manera injusta para algunos, a quien hizo más por ganar. Sirve mucho porque se quita el peso de no ganar en el Azteca y sirve para reforzar el ánimo para enfrentar el miércoles al otro equipo que mejor está haciendo las cosas. Toluca no ha llegado a su tope futbolístico, aunque está subiendo de nivel.

Para acabar, pero no por ello es menos importante, la afición del Toluca está poniendo todo de su parte para que el equipo se sienta cobijado y apoyado. Gran presencia en las tribunas, apoyando y demostrando que hay sintonía entre todas las partes del club. Esperemos que esta luna de miel siga durante mucho tiempo y que el apoyo no falte en momento alguno, así como que tampoco falte el buen fútbol rojo.

miércoles, 3 de agosto de 2022

EMPATE AGRIDULCE FRENTE A PUEBLA

 


Para empezar, hay que destacar que el Puebla de Larcamón es un equipo bien trabajado, una máquina de seguir tácticamente las instrucciones de su técnico y que explota las virtudes de sus jugadores, por ese lado el empate de nuestros Diablos Rojos podría no ser tan malo, pero si vemos las cosas del otro lado, son ellos mismos quienes se ponen el pie solos y se complican, sin necesidad alguna, los encuentros.

En ocasiones el peor enemigo del Toluca es el mismo Toluca. Querer salir jugando sí o sí en todo momento, desconcentraciones en la defensa, expulsiones sin sentido, momentos de fútbol aletargado y la falta de contundencia tunden a las aspiraciones del buen fútbol que todos esperamos y que a cuentagotas hemos presenciado.




Eso sí, garra no le falta a muchos de nuestros jugadores, varias de las incorporaciones se han adaptado bien al equipo y se pueden destacar, como en el caso de Ruiz y Angulo, quienes han dejado claro que llegaron para aportar. Otros jugadores realmente no sé la razón por la cual siguen: López lleva más de 100 centros sin que tengan destino bueno, (dato cortesía de mi amigo T-yes) con una labor defensiva no sobresaliente y que está en el 11 titular por la necesidad de tener mexicanos en campo; Alan Rodríguez no está para un equipo como el Toluca y quizá se le perdonaría un poco su falta de peso si fuera un novato, pero a sus 26 no tiene justificación alguna.

En fin, ya tocando el tema del partido actual, la Franja era una buena prueba para saber dónde estaba parado el equipo y se pasó de panzazo. Tácticamente la partida fue ganada por los visitantes, supieron presionar y complicar las salidas, tanto que generaron un error que acabó en gol. Sólo los últimos minutos de esta mitad se empezó a romper el esquema enemigo, sin embargo, no hubo fortuna.



El segundo tiempo también se empezó con mucho ahínco, el cual fue disminuido por los ajustes que hicieron los contrarios, después de ello llegó la expulsión. Fue ahí cuando se intentó más y mejor el ataque (pese a la falta de un jugador), sumando que el otro equipo ya tenía mucho desgaste físico se logró concretar una, pudiendo ser dos si no hubiera llegado una mala decisión dentro del área.

¿De qué lado nos vamos? ¿Tres juegos sin derrota o dos sin ganar? Sea como sea, el equipo de Ambriz tiene mucho potencial, lástima que no se ha explotado del todo y eso es bueno y malo. Bueno porque sabemos que se pueden venir cosas mejores y es más benéfico que se llegue al mejor nivel al final del torneo y malo porque es un tanto frustrante que no podamos apreciar aún lo mejor del equipo.

Viene otro partido en casa, que se debe ganar sí o sí y esperemos se puedan mostrar lapsos más grandes de regularidad en el encuentro contra Tijuana, equipo que trae dos ex que seguro vendrán con ganas de anotarnos.

miércoles, 27 de julio de 2022

Triunfo sobre la hora en el Nou Camp

 

Los Diablos Rojos del Toluca lograron una importante victoria en casa del León. Sí, costó trabajo, fue con circunstancias favorables en el segundo tiempo y sí, sigue sin mostrarse un equilibrio bueno, aún así creo que se dio un partido inteligente y los 3 puntos vienen bien para lo que será una semana pesada con el trajín de partidos venideros.

Todo el torneo hemos visto que si a nuestro Toluca lo presionan alto se complican los partidos, el rival lo sabía y todo el primer tiempo hizo eso, generando que se generaran pocas opciones de gol, aunque hay que admitir que la defensa se comportó a la altura y si bien no hubo peligro real en nuestra área preocupa que haya tanta “comodidad” a la hora de estar siendo atacados.



La expulsión fue fundamental. Con ventaja numérica era lógico que se buscara el triunfo, se empezaron a aprovechar más los espacios y fueron llegando un par de oportunidades que no se concretaron pese a ser claras. Afortunadamente el gol de Álvarez salvó una noche que hubiera traído aún más críticas si no se conseguía el triunfo.

Es preocupante que los 2 delanteros principales traigan tan mal nivel. Sanvezzo y Charli no andan finos y de seguir así la cosa la temporada podría no tener un final feliz como esperamos. El brasileño se ve desganado en ocasiones y el paraguayo intenta, ha tenido grandes y claras oportunidades, lástima que no se le fa el gol. Para Ambriz la cosa es clara y seguirá brindando oportunidades a ambos esperando que un par de goles los enganchen.



¿Es momento de darle oportunidad a un delantero de la cantera? Yo diría que sí, no como titular, pero sí como un hombre de relevo, para que tenga minutos y empiece a foguearse. ¿Por qué no pensar que la solución está en casa y así, además de ahorrar dinero se consigue a un 9 con amor por los colores?

Fuera de la situación del delantero el equipo trabaja bien, la media tiene mucho talento y la defensa, salvo la lateral derecha, se va asentando más y más conforme pasan los partidos. Se sigue sin un rendimiento parejo como todos queremos, pero es casi imposible que los 90 minutos se juegue al mismo tenor. Eso sí, sigo convencido de que les gusta ser atacados y en ocasiones abusan de eso.



Toluca ha ganado 4 partidos y eso es lo importante. Las formas importan, claro, pero trabajar con triunfos a cuestas hace mejor las cosas. Viene un partido bravo el viernes contra Juárez ahora sí se deben mostrar más de 45 minutos de buen fútbol y, ojalá, que por fin se empiecen a enganchar los hombres de arriba.