Guadalajara Vs Tigres o la mejor final posible

La liga MX llegó a su punto máximo. De los 18 equipos que iniciaron la búsqueda por el título (unos más, otros menos, pero finalmente todos tienen esa ilusión en la jornada 1) ya sólo quedan 2. Quizá no fueron los mejores sembrados ni los que tuvieron la máxima cantidad de puntos en la temporada regular, pero lo que sí son y eso me alegra mucho en lo personal, equipos que han logrado transformar la continuidad y las buenas inversiones en resultados y títulos.

Las Chivas Rayadas de Guadalajara y los Tigres de la UANL son los contendientes, son equipos que han venido ganando trofeos en los últimos años (copa y liga respectivamente) pero, sobre todas las cosas, han venido manejando un proyecto deportivo que la mayoría de los equipos de la liga envidian y en una época donde los números, los puntos conseguidos son los que dictan lo que sucederá, ambos equipos han logrado un balance tal que sus planes han logrado al momento máximo.

Si hablamos de Guadalajara, lo primero que podría venir a la cabeza es Jorge Vergara, dueño del equipo, protagonista de muchos momentos buenos y malos, dueño de declaraciones y polémicas, de promesas incumplidas, pero es un hombre que ha dado la espalda a los reflectores y que desde el año 2015 dio el comando de su equipo a un personaje que ahora es el iniciador de una época que podría marcar la historia de su club: Matías Almeyda.

Almeyda llegó a México para arreglar a un equipo roto, que tenía ciertos problemas en la tabla de cocientes y sobre todo, un equipo sin idea futbolística. El técnico argentino vino a poner orden, a arreglar lo que estaba roto y poco a poco logró conjuntar un equipo que se ha establecido como contendiente a ganar lo que se le ponga enfrente. La Copa MX ya fue conquistada por él y sus dirigidos en un par de ocasiones, pero eso no es su máximo objetivo, su objetivo final es coronarse en la liga y devolver a su club a lo más alto.

Tigres es el club que menos debe preocuparse por la falta de continuidad. Ricardo Ferretti tiene ya muchos años al frente del club y durante esos años ha conseguido muchos títulos nacionales, pero es en los últimos 3 años cuando ha dado pie para convertirse en un equipo de época, su manejo de plantel y su estrategia han hecho de sus Tigres un rival casi imposible de vencer.

Ambos equipos tiene planteles poderosos, han invertido mucho dinero en ellos, tienen técnicos que saben ganar,. Pizarro, Gignac, Zaldivar, Vargas, Pulido, Guzmán, la lista de jugadores de renombre sigue y sigue, los protagonistas en la cancha tienen calidad y eso es algo que conviene al fútbol y al espectador. Línea por línea ambos planteles están parejos, quizá los de Nuevo León resuenan más, pero en cuanto a lo que pueden generar están a la par.

Los medios de comunicación están vendiendo esta serie como un David contra Goliat, poniendo como víctimas a los miembros del "Rebaño Sagrado", eso lo hacen porque a la prensa, a la televisión le conviene más que Guadalajara sea campeón pues es un equipo que vende y vende mucho. Tigres está en un mercado más pequeño y por lo mismo no quieren o no les conviene que sean campeones pues sus raitings caerían.

Dejando de lado todo eso, regresando a lo importante, al fútbol, la paciencia, la continuidad y las buenas inversiones rinden frutos y es algo que deberían tratar de copiar todos los equipos. Los 22 jugadores que inicien en la cancha más los que se vayan sumando durante el partido buscan grabar sus nombres con letras de oro en la historia del fútbol mexicano.

Lo que esperan todos los aficionados es una buena final, habrá quien tenga su favorito por motivos de rivalidad, de no querer ver a alguien campeón, pero queremos buen espectáculo. ¿Quién es favorito? Tigres, pero por muy poco ¿Quién le convendría más al fútbol mexicano que sea campeón? Da igual. El cuento de que si a Chivas le va bien al fútbol mexicano le va bien es un cuento viejo y desgastado. No es más meritorio llegar a una final con 11 mexicanos, eso hace menos a los involucrados y genera una especie de "disculpa" si no consiguen el objetivo. Son 11 futbolistas y la nacionalidad importa poco. En cuanto a Tigres y eso de que a puro billetazo ganan, tampoco es cierto pues hay equipos que invierten igual o hasta más año con año y no consiguen los resultados que los dirigidos por Ferretti. El fútbol mexicano gana cuando el campeón hace bien las cosas y ambos equipos las han hecho bien.

Ya viene lo bueno. Ojalá que gane el que haga mejor las cosas en los 180 minutos y que nosotros, los espectadores, disfrutemos cada momento que nos darán.

Toluca centenario: Sin título, pero con muchos triunfos.

El Deportivo Toluca está celebrando en el año 2017 el aniversario número 100 de su creación, lamentablemente para todos los miembros del club (directivos, jugadores, afición) el título no se dio al quedar eliminados en la fase de semifinal por la escuadra de las Chivas Rayadas de Guadalajara. Por supuesto que el éxito deportivo y el objetivo principal no se cumplió, pero hay muchas cosas por las cuales pueden estar contentos y que si se manejan bien pueden servir en el futuro para bien del club.

El centenario no se pudo festejar del todo, pero dejo cosas buenas.

De las primeras cosas que se podrían destacar es la confirmación de Francisco Suinaga como un directivo que está al pendiente del club y sus necesidades. El actual vicepresidente deportivo logró refrescar a una directiva que se veía acartonada, sin que se e viera interés en el equipo. Suinaga aún tiene muchas cosas por hacer, armar un equipo aún más competitivo, no traer refuerzos que casi no tengan participación y debe fomentar y apoyar a las fuerzas básicas. Su periodo no lleva mucho y para cuajar un proyecto se necesitan años, pero inició bien y debe mantenerse así o mejorar.

Suinaga es parte importante del nuevo proyecto del Toluca

Otro de los aspectos positivos que se pueden destacar es la asistencia al estadio y el estadio por si mismo. En Toluca pasa un fenómeno muy raro y ese fenómeno es que cuando un lugar (establecimiento comercial, centro de entretenimiento, etcétera) se inaugura siempre está lleno y eso pasa por mucho tiempo, la moda domina al ciudadano y hace lo imposible por estar o asistir. Ese fenómeno se dio con la remodelación y reinauguración del estadio Nemesio Diez, la gente quería asistir siendo o no aficionada al equipo, causando eso grandes entradas al inmueble rojo.

Antes, el aficionado casual o de otro equipo no asistía por considerar la cancha del Deportivo Toluca un estadio viejo e incómodo, ahora la cosa es distinta pues el estadio está a punto de quedar completamente funcional, con buenas instalaciones, asientos cómodos, visibilidad perfecta por todos lados y próximamente locales de comida que harán aún mejor la experiencia para aquel que está de visita. La directiva debe lograr que la asistencia al estadio sea una experiencia buena para que los asistentes quieran repetirla, eso generará que ese asistente casual se haga asiduo y así se pueda ir generando más y más afición, trayendo esto más ingresos para la directiva y buenos momentos para el asistente, asiendo que sea una situación gana-gana para todos.

El estadio Nemesio Diez ahora es muy funcional y atractivo.

Aún hay que esperar a que se finalice el proyecto del Nemesio Diez, pero va por buen camino todo, también hay cosas que deben mejorarse como los accesos, la seguridad, las revisiones, cosas que incomodan a cualquier asistente sea permanente o sea casual, detalles como esos ahuyentan a los futuros clientes (en este caso los aficionados) y causaría que se alejaran de los partidos. También, considerando que el boom del centenario ya pasó (por el hecho de que se quería festejar en el semestre que caía la fecha) puede que la asistencia baje, puede que no, de eso deberá encargarse el departamento de mercadotecnia para que sea lo menos.

finalmente, pero no por eso menos importante, está la afición. El torneo que recién acabó generó una unión y comunión entre los aficionados del equipo, una que desde que recuerdo sólo se daba en las finales y ahora el caso fue diferente pues se dio en todos y cada uno de los partidos que se realizaron, sin importar el rival o le fecha.

La afición no quedó a deber nada.

El centenario podría ser un parteaguas en la afición. Hubo épocas en donde era poca, otras donde las tribunas se retaban entre ellas porque consideraban a los de sol "jodidos" y a los demás fríos e indiferentes...esa época ya pasó. Un espectáculo muy lindo era ser parte de los cánticos, la emoción que hacía erizar la piel de todos, la alegría pese a las muchas malas tardes que se tuvieron en lo deportivo, todo debe seguir así o cuando menos eso se espera.

Por supuesto que hubo fallas, sobre todo en la cancha. Esas fallas se pueden arreglar y deben de hacerse bien las cosas para poder competir con los planteles poderosos de la liga y con los proyectos que ya están establecidos. La cosa será traer a jugadores de calidad y que contribuyan a la base que se tiene.

Nunca es malo recordar que aún cuando no se consigue lo que se busca, hay cosas para destacar y rescatar, con las que se pueden hacer mejoras para que en algún punto todo esté en comunión y se consiga, entre todos los participantes, llegar a la cima. El centenario pasó, pero el equipo se queda y es un equipo que con el apoyo de su afición puede llegar a lo más alto.

El Renacer de los orgullosos verdes.

las finales de conferencia de la temporada 2011-2012 fueron un parteaguas para el basquetbol. LeBron James enterraba la última gran oportunidad de los Celtics de Pierce, Garnett, Allen y Rondo para conseguir otro título, la historia contará que a partir de ese momento inició la enorme seguidilla de finales y títulos para el oriundo de Akron, Ohio y que los Celtics acababan con un equipo que jugaba bien, pero la edad los venció.

Danny Ainge, el genio que está detrás de la dirección deportiva de Boston dio un giro después de eso. La temporada ('12-'13) siguiente los Celtics no pudieron pasar de la primera ronda y no se veía futuro para el equipo. La decisión de mandar a Garnett y Pierce junto con otros jugadores hacia Brooklyn por contratos malos y una serie de elecciones de draft a futuro, dejar ir al entrenador "Doc" Rivers a Los Ángeles y contratar a un talentoso, pero extremadamente joven Brad Stevens para tomar las riendas del equipo generó muchas dudas en el mundo del básquetbol.

Stevens llegó a los Celtics con 36 años de edad. 

Rajon Rondo era la última figura de aquella gran generación, el hombre que debía cargar con el equipo y guiarlos al éxito, pero las lesiones sólo le permitieron disputar 30 juegos. Con un cuadro repleto de jugadores de relleno  y un par de jóvenes prometedores, los Celtics tuvieron el quinto peor registro de la liga (25-57 en la temporada '13-'14), todo mundo pensaba que el "Tanking" se daría por mucho tiempo y que pasarían muchos años para que se volviera a luchar por entrar a playoffs.

En la siguiente temporada el dúo Ainge-Stevens empezó a generar. Pese a deshacerse de Rondo, su mejor jugador, y traer a jugadores que no tenían cabida en sus equipos (Isaiah Thomas, Jae Crowder, Jonas Jerebko) los Celtics sorpresivamente se colaron a los playoffs mucho antes de lo esperado. La derrota contra los Cavaliers de LeBron era lo menos importante, el proyecto se había adelantado y el futuro se veía alentador porque las selecciones de los Nets empezarían a llegar.

Isaiah Thomas, el lider de los Celtics.

Para la temporada '15-'16 los Celtics siguieron subiendo como la espuma encabezados por un jugador que fue elegido último de su generación, que pocos le tenían confianza por su falta de estatura y que logró crecer en Boston. Isaiah Thomas logró comandar a un grupo que compensaba la falta de estrellas con juego de conjunto, logró su primera aparición en un juego de estrellas y se echó al hombro a una franquicia urgida de éxito. Los playoffs se volvieron a alcanzar, pero de nuevo se salió en la primera ronda siendo víctimas de los Atlanta Hawks 4-2. Ya era tiempo de dar el siguiente paso y el equipo finalmente tenía la capacidad monetaria tras deshacerse de contratos enormes de sus libros financieros y gracias a la debacle de los Nets se tenía la tercera selección global.

Llegando a la actualidad, los Celtics siguen sorprendiendo. Lograron traer a un jugador de renombre como Al Horford, Kevin Durant rechazó llegar a la escuadra verde, pero eso no pesó más que en el orgullo de algunos aficionados y jugadores. Los Celtics se apoderaron de la mejor siembra de su conferencia, han llegado a las finales de la misma, gracias a los tratos de antaño tienen la elección número uno del próximo draft y siguen teniendo la posibilidad de atraer a otra estrella y reforzarse con jóvenes.

Trabajo y humildad, la filosofía que ha llevado a los Celtics a las alturas.

No es seguro que todo esto traiga campeonatos, puede que las contrataciones no sean buenas, la agencia libre se puede llevar a miembros clave del equipo, pero si algo es seguro aquí es que un buen manejo de material humano sumado con un entrenador que sabe lo que hace puede llevar a un equipo a grandes alturas de manera inesperada.

La nación celta esta contenta, más porque los eternos rivales están hundidos en el fondo de la liga y no se ve mucho futuro para ellos. Puede que los Cavs sigan eliminando al equipo, pero seguro es que las derrotas se venderán caras y que el futuro, el futuro es más verde que nunca.