El andar de José
Cardozo como director técnico del Deportivo Toluca está atravesando el punto
más bajo desde que el otrora goleador del equipo tomó el mando de unos diablos
que venían de dar un torneo bastante malo, comandados por otro ídolo de la
afición roja: Enrique Meza, el cual después de alcanzar la final en el apertura
2012 se desinfló y sólo pudo conseguir 18 puntos, lo cual causó que tuviera que
dejar el banquillo de la escuadra como escarlata.
Cardozo llegó y logró
cambiar la mentalidad de los jugadores, además de armar al plantel a su antojo,
trayendo a jugadores de su confianza (destacando que la mayoría fueron paraguayos)
y dándole nueva oportunidad a jóvenes promesas que habían salido del equipo y
que gracias a él retornaron a la institución. Todo iba bien pues el equipo en
su primer torneo logró llegar a semifinales y dejó una sensación de que su
proyecto tenía futuro prometedor.
Para su segundo
torneo, dio la impresión de que su capacidad como técnico iba mejorando, pues
el funcionamiento del equipo seguía creciendo, el equipo se seguía reforzando
con jugadores que daban buenas impresiones y pese a algunos errores en
contrataciones logró llegar a la final del torneo de CONCACAF y que fue la
primera prueba de gran calibre que tuvo y no logró superarla pues su poca
experiencia hizo que no pudiese sacar jugo de un reglamento que pudo ser
utilizado a su favor, pero su tibieza en los planteamientos y un poco de mala
suerte empezaron a marcar su camino. En el torneo local de nuevo quedó
eliminado en semifinales, pero pese a eso la directiva y la afición siguieron
ilusionados con lo que veían, pero no todo era miel sobre hojuelas en el
infierno.
El torneo apertura
2014 llegó y con él una nueva oportunidad para Cardozo de dejar huella en el
club, pero las cosas desde el inicio no fueron buenas. La salida de jugadores
que habían respondido de gran manera con el club y la forma en que se fueron
(específicamente Antonio Naelson “Sinha”) y jugadores que cuando participaban
lo hacían de manera eficiente (Wilson Tiago y Edy Brambila) generaron un poco
de dudas en una parte de la afición, pues eran jugadores de calidad pero que al
parecer no llenaron el ojo al técnico y dejó ir por nada.
Para suplir a un
hombre como “Sinha” la directiva desembolsó una cantidad muy fuerte para poder
traer a su reemplazo, a un jugador ya probado en México pero que no venía de
dar buenos torneos y que se esperaba que retomara calidad en el equipo
mexiquense y que también se esperaba se echara al equipo en la espalda: Lucas
Lobos. Lamentablemente su participación fue
muy gris y pese a ser uno de los pasadores más destacados del torneo no fue ni
la sombra de lo que llegó a ser en su equipo anterior y mucho menos fue alguien
que supliera al “diez” histórico de Deportivo Toluca.
Pese a todo, la
competitividad se mantuvo, el equipo caminó bien y pese a decisiones que fueron
criticadas arduamente por la afición (mantener a Pablo Velázquez pese a su nulo
aporte) no dar más minutos a un Isaác Brizuela para que retomase nivel y
planteamientos que no proponían, se mantuvo viva la oportunidad de lograr la
calificación a la copa libertadores, de pelear por la copa MX y de entrar a la
liguilla en buena posición.
La cosa no fue tan
buena como todos en la institución hubiesen querido, mandar un equipo alternativo
en la copa costó la eliminación en la misma, planteamientos defensivos de
visita causaron que no se consiguieran los puntos necesarios para ingresar a
libertadores y además eso causó que se entrara a la liguilla en la cuarta
posición, pero también debe destacarse que Cardozo empezaba a entrar en un
juego donde decía una cosa a la prensa pero la actitud que su equipo mostraba
en la cancha era otra, causando esto molestia en un sector cada vez más grande
de la afición.
La liguilla de ese
torneo inició y se vio a un Toluca parco, sin identidad, sin imaginación y con
una falta de fútbol tan grande que generó dudas y aunque se logró llegar y caer
eliminados de nuevo en semifinales, ya no era suficiente para nadie, pues se
suponía era el plantel más completo que se tenía en mucho tiempo o por lo menos
eso parecía.
Las cosas no
mejoraron, se volvieron a ir jugadores importantes para el club (Miguel Ponce e
Isaác Brizuela) y se trajeron jugadores poco exitosos dentro del ámbito local
además de refuerzos extranjeros que no han podido hacer mucho por su poca o
nula participación en el equipo (hasta el día que se escribe esto) además de
una serie de resultados que han dejado muchas dudas, incluida una goleada en
contra con marcador de 6-1 frente a un rival de la liga de ascenso.
El andar de Cardozo al
frente del Deportivo Toluca ha sido, numéricamente, bueno, pues en liga MX su
marca es de y su respectiva liguilla es de 28 ganados, 23 empatados y 15 perdidos
con 97 goles a favor y 60 en contra. En copa MX el saldo es de 3 ganados, 2
empatados y 4 perdidos con 13 goles a favor y 17 en contra y finalmente en la
CONCACAF liga campeones sus números quedaron en 6 triunfos, 4 empates y 0
derrotas con 21 goles a favor y 7 en contra.
Como se puede
observar, los números son positivos, pero el funcionamiento del equipo ha
dejado mucho que desear, además de que la actitud del técnico es de poca
autocrítica y no sabe plantear los partidos donde se juega cosas importantes.
También se le critica la manera en que bajo su mando se han ido jugadores
importantes y su necedad de mantener a jugadores con bajo nivel en la
titularidad. Sumado a estas situaciones, la falta de control que ha mostrado
durante el clausura 2015 en el equipo, ha calado duro, poco juego, perder en
dos ocasiones con un equipo de ascenso, separación injustificada de Jerónimo
Amione del primer equipo y el mal cierre del torneo anterior han causado que la
gente empiece a perder la fe en él.
Para cerrar está la
división entre los mismos aficionados, pues existe una parte que está a morir
con él por lo que logró como jugador y otra parte que ha visto que no se puede
lograr nada con él en el banquillo. Esa separación no es sana y tomando en
cuenta la histórica actitud de poca unión entre la afición del Deportivo
Toluca, no pinta bien el asunto.
Cardozo es y será un
ídolo para el club por todo lo que aportó dentro de ese bello rectángulo verde
que es la cancha pero su actitud y desempeño desde la zona técnica deja dudas
grandes. ¿Podrá revertir el mal momento y mejorar? O ¿Tendrá que dar un paso al
costado y darle la oportunidad a alguien más para buscar lo mejor para el club?